Sí, en las extremidades varias horas. Persisten cambios metabólicos con la glucosa, lactosa, compuestos fosforados y otros. El esqueleto resiste durante horas la privación de oxíge no. Los músculos mueren más rápidamente.
Se explica entonces que sean reimplantados segmentos del cuerpo siempre y cuando sean conservados sin alteración. La muerte real de los tejidos se produce cuando se agotan las reservas de trifofato de adenosina.
La muerte del cuerpo no es, pues, total y fulminante, sino parcial y gradual. El órgano que decide si hay o no vida, es el cerebro. Se exigen para ello dos registros electro-encefalográficos horizontales. Es decir, que no marquen actividad alguna. Esto se exige cuando los médicos se disponen a extraer, por ejemplo el corazón de un cuerpo con fines de trasplante.
Puede ocurrir que una persona colocada en el CTI (Centro de Tratamiento Intensivo) mantenga su circulación y su respira ción por medios artificiales y sin embargo esté cerebralmente muerta desde días atrás. Las fronteras entre la vida y la muerte en el mundo animal son difíciles de establecer. En el caso del hombre, es ahora necesario preguntarse no si hay vida, sino ¿cuánto de vida?.
Desde hace varios años ha sido necesario crear, en los grandes países, centros especializados para recibir "comas so brepasados" -en pacientes potenciales dadores- procedentes de hospitales que carecen de medios para diagnosticar debida mente la muerte y efectuar extracciones de órganos trasplantables. Por ejemplo en uno de estos centros en Francia, en cinco años, se registraron 170 dadores potenciales recibidos. De ellos, 72 no pudieron ser utilizados y 98 procuraron 167 ríñones y 12 hígados que pudieron ser trasplantados. Una droga, la ciclosportina, facilita la aceptación del receptor.
Tanto en el mundo animal como en el vegetal se distinguen varios tipos de muerte:
a) la muerte real y la muerte aparente (fenómenos de inmovilización refleja o acinesia). Está presente en insec tos y en mamíferos como pauta de comportamiento autodefensivo.
b) la vida latente. Son bacterias que sobreviven durante millones de años dentro de cristales de cloruro de sodio. Esporos de hongos -hallados en tumbas faraónicas invioladas y causantes de infecciones mortales en sus exploradores. Es un estado vital opuesto a la vida mani fiesta.
c) la criptobiosis -o vida oculta-, con metabolismo amorti guado, la cual puede adoptar diversas formas.
El dilema de Hamlet "To be or not to be" no vale en biología, puesto que se presentan estados intermediarios entre la vida y la muerte.
d) la anhidrobiosis -privada de agua-, es una deshidratación progresiva que provoca el enlentecimiento de los procesos vitales.
e) la cribiosis -vida suspendida- por congelación natural o artificial.
f) la abiosis -supresión temporaria de la vida-. En el perro se logra experimentalmente por extracción total de la san gre, pero puede durar sólo unos minutos sin que se corra el riesgo de muerte real.
En resumen: en dichos estados es imposible postular la existencia de una vida misteriosa o inmanente. Persiste una estructura incambiada y el retorno a la vida no constituye una nueva vida porque su proceso ha quedado simplemente inte rrumpido.
¡Añejas bacterias! ¿Cuándo surgieron sobre el planeta como iniciadores del inmenso mundo vegetal?
Las primeras investigaciones sobre fragmentos de sílice extraídos de profundidades en los EEUU gracias al microscopio electrónico -con aumentos de 2000 diámetros-, revelaron bacte rias fósiles cuya edad fue calculada en 300 millones de años. Sucesivamente se registraron otras de 500,600 y hasta de 1000 millones de años. Se trata de auténticos microfósiles. ¡Porten tosas bacterias longevas!
Los paleobiólogos nos sacuden con sus hazañas. Tales fósiles ¿son seres vivientes?.
Sabíamos que semillas de trigo -recogidas en tumbas faraónicas- fueron capaces de germinar. Aunque ese hecho fue luego puesto en duda. Pero no el siguiente: en minas de Alemania -a 1000 metros de profundidad- se han encontrado bacterias desecadas dentro de cristales de sal, que pudieron ser revividas, o sea cultivadas 650 millones de años después de permanecer "dormidas" ¿o muertas?
El autor de ese hallazgo -Dombroski- prosiguió los estudios en suelos americanos y descubrió otras bacterias reviviscentes que databan también de millones de años atrás.
Esta capacidad de conservación de vida virtual fue ratificada en un laboratorio previamente esterilizado con rayos ultra violetas y adoptando las máximas precauciones de asepsia similar a las que se preven para una intervención quirúrgica. Bacterias sumergidas en soluciones de creciente concentración salina, luego de permanecer totalmente desecadas, fueron capaces de resucitar.
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